sábado, 12 de abril de 2014

La culpa la tiene Sabina

Suenan las once en tu reloj y ya son dos horas que no paras de gritar.
No has dejado de hacer gestos raros.
Tal vez debería decir algo. O dejarte de mirar.
Perdón si sonrió, pero estas preciosa.
Así de mal humor y despeinada.
Y entonces lo digo.
Te quiero... y no sé por qué no dejo de sonreír.
Te propongo algo.
Vamos a aprender a flotar cuando haga falta y a sumergirnos cuando avistemos al enemigo.
A ese cabrón del orgullo.
Ahogarnos cuando no quede agua que nos haga flotar en nuestros sueños.
Y a nadar cuando veamos tierra.
La culpa la tiene Sabina.
Porque lo que yo quiero, es que mueras por mi también.

Mario Carrion y Paula Cosau

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Te gusta lo que lees? Me gustaría saber las opiniones de todos aquellos que lleguen hasta aquí, y lean mis líneas.

Muchas gracias por tu opinión